Visita a Elvas

Durante el fin de semana del 31 de octubre al 2 de noviembre hemos disfrutado de un relajado y reponedor fin de semana alojados en la localidad de Zafra en los apartamentos rurales El Campito y hemos aprovechado a fondo los tres días para visitar lugares de Extremadura y de paso hacer una breve incursión en la localidad portuguesa de Elvas.

Por su histórica posición estratégica, Elvas fue la primera ciudad fronteriza en ser fortificada permanentemente después de la Restauración de la Independencia. Entre 1645 y 1653 se construyó una nueva fortaleza sobre las que la antecedieron, a partir del método holandés. Compuesta por siete baluartes, la estructura final, con los Fuertes de Santa Luzia y Nuestra Señora de Gracia, es considerada una de las mayores y mejor conservadas fortificaciones bastionadas del mundo, totalizando un perímetro superior a 10 kilómetros. Testigo de su importancia es también el riquísimo patrimonio religioso que hoy día puede ser visitado. Elvas fue diócesis de 1570 hasta 1881. En el local donde se alzaba un templo gótico, D. Manuel I mandó construir en 1517 la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, que más tarde sería la Sé y una de las iglesias más notables de la ciudad.

Empezamos nuestro recorrido por la impresionante fortaleza de Elvas, aparcando el coche en una de los parkings ubicados a las afueras de las murallas, concretamente el que se encuentra a la derecha de una plaza en la Avenida de Badajoz con una fuente. Sin problemas encontramos aparcamiento y en primer lugar llegamos a la Plaza del 25 de abril en la que se encuentra la Fuente de la Misericordia.

Seguimos paseando por la Rua Alferes hasta llegar a la Plaza de la Misericordia, en donde se encuentra la Iglesia del mismo nombre.

  

El exterior del edificio está constituido por varias ventanas en mármol. Sobre la puerta principal están las armas reales del rey D. Joao V. En el interior del edificio encontramos un ancha escalera de mármol. Tiene tres naves separadas por cuatro arcos. La capilla principal tiene una cúpula y un altar con la Visitación.

Por la calle Da Cadeia y pasando por la Torre Fernandina llegamos a la Plaza de la República en donde se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, antigua catedral de Elvas.

La construcción de la antigua catedral de Elvas comenzó en 1517 por el arquitecto Francisco de Arruda. Finalmente se abrió al culto en 1537 pero las obras continuaron hasta finales de siglo bajo la dirección del maestro albañil Diogo Mendes.

Con la creación del Obispado de Elvas en 1570, la iglesia pasó a ser la Sede Catedral de ese mismo obispado hasta 1881.

El interior de la iglesia está marcado por dos estilos: el manuelino y el barroco. El primero se nota en los techos y en las puertas laterales y el barroco en las capillas laterales y en la principal y por supuesto en el gran órgano, pieza magnífica realizada en talla dorada.

  



  

Nuestro siguiente punto en el paseo por Elvas sería la Iglesia de las Dominicas, impresionante su interior. El convento fue fundado en 1528. Las obras de la iglesia empezaron en 1543 y terminaron en 1557. Posee una rara planta octogonal centralizada con una decoración armoniosa marcada por la pintura, la azulejaría y la talla dorada, con un cimborrio soportado por ocho columnas de mármol pintadas del siglo XVI con grotescos, cintas y guirnaldas.

 

Pasamos por el Arco de Santa Clara en dirección al castillo.

Y antes de llegar al mismo, pasamos al interior de la iglesia de Santa María de Alcáçova. Construida en 1230. Su interior tiene tres naves abovedadas.

Las calles estrechas de Elvas me recordó mucho al barrio de Alfama de Lisboa.

Castillo de Elvas

Fue el primer edifício reconocido en Portugal como Monumento Nacional, em 1906, y es el monumento militar más antiguo de Elvas construído sobre los vestigios de una construción romana. Después de la reconquista cristiana de Yelves (nombre de la Elvas islámica) el castillo fue refundado en 1228, siendo sucesivamente reforzado en los siglos XIV y XV. En la puerta de entrada encontramos el blasón del rey D. João II y en su interior el edificio medieval de residencia del alcaide. Perdió su utilidad militar en el siglo XVII, con la construción de las murallas abaluartadas. Sufrió importantes obras de recuperación en 1940.

Se puede visitar el Adarve dando una vuelta por sus murallas y subir a la Torre del Homenaje.

  

Una vez terminada la visita al castillo, proseguimos en nuestro paseo por Elvas. Ahora nos tocaba volver al aparcamiento y de camino aprovechamos para visitar algunos otros interesantes lugares de esta singular localidad portuguesa.

Como por ejemplo la Iglesia de la Orden Tercera de San Francisco. Destaca por su riqueza decorativa, característica del estilo barroco del siglo XVIII. El diseño del edificio es del arquitecto Joao de Madeira. El interior es caracterizado por su imponente estilo barroco, presente particularmente en la capilla principal toda cubierta de oro. El retablo principal tiene cuatro columnas soportadas por atlantes.

A lo largo de toda la iglesia vemos paneles de azulejos del siglo XVIII que cuentan episodios de la vida de San Francisco de Asís.

Justo detrás de la Iglesia de los Terceros se encuentra el Cementerio de los Ingleses donde se dio sepultura a algunos de los oficiales ingleses caídos durante las invasiones napoleónicas.

A pesar de que el cansancio ya iba haciendo mella en nosotros, seguimos con nuestro paseo por Elvas, hasta la Iglesia de San Pedro desde donde pudimos contemplar unas preciosas vistas de la ciudad.

Y ya bajando por toda la Rua da Bandeira, nos encontramos con la Iglesia de San Lorenzo y la Fuente del mismo nombre.

  

Y así llegamos de nuevo al aparcamiento, no sin antes deleitarnos con la vista del impresionante Acueducto da Amoreira.

Sin duda, volveremos porque no tuvimos tiempo de visitar todos los lugares más destacables del precioso pueblo de Elvas como el Fuerte de Santa Lucía entre otros.

Espero que os haya gustado este reportaje fotográfico. Os aconsejamos si estáis por Badajoz acercaros a Elvas, no os defraudará.