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Castillo de Xátiva

El Castillo de Xátiva es una doble fortaleza situada a la sierra Vernisa sobre la ciudad de Xátiva (Valencia, España).


Esta doble fortaleza aparece en el escudo de Xátiva que tiene como elemento central una torre de la que parten dos brazos amurallados que acaban en un castillo cada uno que representan los dos castillos de Játiva. El Castillo de la izquierda recibe el nombre tradicionalmente de Castillo Menor, mientras que el castillo de la derecha recibe el nombre de Castillo Mayor.

Esta fortificación tiene sus orígenes en una construcción ibérica que aprovechaba una de las partes más altas de la montaña en este punto (Castillo Menor). Los romanos, posteriormente, al conquistarla, añadieran en el otro punto elevado que presentaba la montaña una segunda fortaleza que se comunicaba con el anterior (Castillo Mayor). Ambas fueron reformadas por los árabes, que además ensancharon la muralla, hasta hacerla coincidir prácticamente con la actualmente conocida. Después, con mayores o menores reformas, estas murallas y el castillo afrontaron la conquista de Jaime I, la rebelión de las Germanías y la Guerra de Sucesión, pero la base del conjunto arquitectónico fue esta.

Después de la conquista de Jaime I y la creación del Reino de Valencia el Castillo cumplió la función no solo de defender la ciudad sino de Prisión de Estado de la Corona de Aragón. Así entre otros prisioneros célebres allí estuvieran: Los infantes de Sardanés, Alfonso y Fernando, los nietos de Alfonso X el Sabio, Jaime de Aragón, el Conde de Urgel, Maroto Ugolen comendador de la orden de San Juan, el Marqués de Oristany, Pere Quixal, Abad de Poblet, Didac de Borja, hermano de Francisco de Borja y el Duque de Calabria.

Durante casi toda la existencia del Reino de Valencia, el Castillo de Játiva y la misma ciudad fueran una plaza muy importante para este. El motivo era que Játiva era la entrada natural desde el Reino de Castilla y, por lo tanto, era un punto clave en el control del reino. Si bien es cierto que con la unificación de las coronas hispánicas (que no de los reinos), este papel no fue tan importante, el hecho de que continuara siendo una prisión de Estado durante el siglo XVI y que Xàtiva era la capital de la Gobernación allende el Júcar y la segunda ciudad del Reino, hicieron que el Castillo continuara jugando un papel importante hasta la Guerra de Sucesión.

Durante casi todo este tiempo se la consideró una de las mejores fortalezas no solo de la Corona de Aragón, sino de toda la península. Así, en una confrontación convencional y con una buena guarnición y provisiones, resultaba muy inexpugnable. Por un lado, el que da a Bixquet, es decir, en el interior montañoso de Valencia, desde donde era difícil que viniera un ataque, los dos Castillos de Játiva estaban protegidos por los acantilados de la sierra Vernisa, mientras que por el otro, los atacantes debían superar el juego de murallas: en primer lugar una muralla principal que protegía toda la ciudad, y en segundo lugar varias murallas secundarias. Superado eso, quedaba la dificultad de entrar en la fortaleza, ya que, al tratarse de dos castillos y no de uno, los defensores podían retirarse al segundo si veían perdido el primero.

La decadencia del Castillo de Játiva llegó con la Guerra de Sucesión, ya que en esta se utilizó artillería pesada capaz de echar a perder en poco tiempo las anticuadas murallas que defendían la ciudad. Consciente de eso, Juan Bautista Basset como general de las tropas austriacistas de Valencia, y como ingeniero y artillero que era, reforzó todas defensas de Játiva y especialmente el Castillo. De hecho aún se conserva una torre en el castillo conocida como Garita Basset. Su esfuerzo le sirvió por salir con éxito de un primer asedio a Játiva en mayo de 1706 conducido por el Conde de las Torres de Acorrin, pero al año siguiente, ya sin Basset y ante una artillería más pesada, las murallas de la ciudad fueran asaltadas en dos puntos y el Castillo sufrió muchos daños. Pese a ello, las tropas de Asfeld, que provenían de la victoria en la Batalla de Almansa no pudieran llegar hasta el Castillo a causa de su carácter elevado y se dedicaran a bombardearlo. Este solo se rindió después de que la guarnición mayoritariamente inglesa y en oposición a las intenciones de catalanes y maulets, pactó con el francés la salida el 12 de junio de 1707 (después de aproximadamente de un mes largo de asedio. A partir de aquí, aunque aún sería utilizado en la Guerra de la Independencia Española, el castillo entró en decadencia a causa sobre todo del exterminio de Játiva, pero también del terremoto del 1748.

Ya en el siglo XX, el Castillo pasa a manos de Gregorio Molina, que había hecho fortuna con la fabricación de papel,industria tradicional en Játiva. El resultado fue la construcción del conjunto neogótico que ocupa la parte central del Castillo y que aparece a la fotografía adjunta en primer término. Este conjunto vino a constituir un tercer castillo que se añadía a los otros dos. Más tarde, el Castillo fue adquirido por la Caja de Ahorros Valencia (actual Bancaja) y esta se la vendió recientemente a la Generalidad.






Actualmente, el Castillo es patrimonio de todos los valencianos, y se gestionado por el Ayuntamiento de Játiva. Si bien en la entrada principal ondean las banderas oficiales, arriba de los dos Castillos, solo se encuentra la Señera de Játiva.

En el año 2008 fue elegido como una de las siete maravillas valencianas.

La puerta principal de entrada es la llamada "Puerta Ferrisa", la actual es una restauración y en su origen tenía puente levadizo. Delante de ésta, estaba la Puerta de Fuera, ya desaparecida. La puerta está abierta en una torre de construcción moderna y podemos observar en su fachada los escudos de Xátiva y las barras de la Corona de Aragón.


Entrando por la puerta principal, se accede a la plaza de armas que divide el Castillo en Castillo Menor, a nuestra izquierda y Castillo Mayor a nuestra derecha.

El Castillo Mayor posee un muro flanqueado por torreones cúbicos de traza islámica que alternan con torres cuadradas de época cristiana, todo sobre base romana.


Si empezamos nuestro recorrido por el Castillo Mayor, nos encontramos con la puerta principal posterior de acceso al castillo, la Puerta del Socorro construida en el siglo XIV, que en caso de asedio permitía la comunicación con el exterior a través del valle de Bixquert.


Casi enfrente de la puerta del socorro, en un edificio de traza neogótica, encontramos la capilla moderna de San Jorge (Sant Jordi). Esta capilla se ha construido problablemente en el solar de la antigua capilla de Santa Ana del Castillo, que existió durante los siglos XIV y XV, según un grabado de 1564, ya que cada castillo, el Menor y el Mayor tenia su propia capilla. En este lugar comenzaba el castillo mayor, ya que allí estaba situada la primera puerta.




Subiendo por una escalinata, nos encontramos con una zona ajardinada con dos cañones de la Guerra de Sucesión.



Más arriba, nos encontramos con la Torre Redonda.



Seguidamente la Puerta del "Malanyat", por donde se salía a la Devesa, donde se dejaba pastar al ganado, que abastecía a los guardas del castillo.


Por último, nos encontramos con la tercera puerta del Castillo Mayor, el Portal de Santa María.


En el recinto más alto se encuentra la capilla de Santa María, que es la edificación que nos ha llegado más completa, mandada levantar en 1435 por la reina María esposa de Alfonso el Magnánimo. Es un edificio de pequeñas dimensiones, con puerta lateral de dovelas semicirculares enmarcadas por un arrabá rectangular. El interior es de tres bóvedas de nervaduras diagonales de medio punto, las cuales arrancan de modillones que ostentan las armas reales. En el centro de la nave se colocó hace unas décadas el sarcófago moderno que - se dice- contiene los despojos del conde Urgell, pretendiente a la Corona de Aragón en el Compromiso de Caspe, preso en este Castillo, donde murió.




Muy cerca de la capilla está la famosa prisión también del siglo XIV. Consta de una cámara para el cuerpo de guardia, a través de la que se accede a una estancia rectangular carente de iluminación, cubierta por una imponente bóveda ojival de piedra. Pocas veces una obra arquitectónica produce sensaciones tan siniestras.

La parte más elevada de la fortaleza la ocupa la zona, hoy ruinosa, que es conocida como Sala del duque de Calabria por haber sido la residencia especial donde estuvo prisionero a principios del siglo XVI Fernando de Aragón, que, muerto Fernando el Católico, sería virrey de Valencia. Guerras y terremotos han hecho desaparecer casi por completo estas dependencias, de las que subsiste una grácil ventana bífora de restaurado ajimez.



El Castillo Menor está compuesto por un recinto fortificado de menores dimensiones al cual se accede por una puerta ofijal de arco apuntado llamada Puerta de Aníbal.




Una vez dentro del recinto destaca una torre donde encontramos un balcón, desde el cual se divisa una de las mrjores vistas del castillo. Se llama el balcón de la reina Himilce. Himilce era una mujer ibérica natural de Cástulo (Linares) en la provincia de Jaén y esposa de Aníbal, que tuvo un hijo en este castillo en el año 218 a.C., antes de la conquista de Sagunto. Himilce significa reina en lengua púnica.



Desde esta posición vemos el Castillo Mayor que ya hemos visitado.


La visita al castillo de Xátiva es totalmente recomendable, incluso yendo con niños, pues todos sabemos el interés que estas edificaciones despiertan en ellos. No os perdáis las impresionantes vistas de Xátiva desde el castillo.




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