Blog Los viajes de Dora Marchando una de espetos - Día 4 ~ LOS VIAJES DE DORA
Ir al contenido principal

Marchando una de espetos - Día 4

Hoy iba a ser uno de esos días memorables de nuestro viaje en verano 2020. Después de tener que anular el viaje por Europa que íbamos a hacer por la pandemia, y de haber decidido pasar unos días por Andalucía, teníamos claro que uno de los hitos de este viaje iba a ser el Caminito del Rey, una senda área construida en las paredes del Desfiladero de los Gaitanes de aproximadamente unos 3 kilómetros de longitud. Se inicia en el término municipal de Ardales y concluye en El Chorro. 

El sendero fue construido porque la Sociedad Hidroeléctrica del Chorro, propietaria del Salto del Gaitanejo y del Salto del Chorro, necesitaba un acceso entre ambos saltos de agua para facilitar el paso de los operarios de mantenimiento así como el transporte de materiales. 

Las obras se iniciaron en 1901 y concluyeron en 1905. Con el paso del tiempo, el abandono y la falta de mantenimiento hicieron que el sendero fuera prácticamente impracticable con zonas en las que el pavimento se había destruido y desaparecido. 

En el año 1999 y 2000 se produjeron varios accidentes mortales por lo que se cerraron los accesos al camino. En Febrero de 2014, la Diputación de Málaga inició el proceso de restauración del Caminito del Rey y a finales de marzo de 2015 se abrió al público. 

Hoy en día la visita del mismo es totalmente segura y toda una experiencia inolvidable. 

Teníamos hora reservada para las 11:15 pero conociéndonos, sabíamos que íbamos a llegar con bastante tiempo antes, así que después de un desayuno copioso, tomamos el coche y en más o menos una hora  ya estábamos aparcando el coche en el aparcamiento norte que se encuentra junto al Restaurante el Mirador. 




Como aún teníamos mucho tiempo para la hora de inicio de la reserva ya que tan solo se tarda aproximadamente una media hora desde que empiezas el recorrido y pasas el túnel hasta la entrada a las pasarelas, decidimos tomar algo en el restaurante y de paso, aunque llevábamos unos bocadillos de pan de molde, comprar unos bocatas de pan  normal porque si nos apetecían más que los otros. 

Con todo aproximadamente un poco antes de las 10 y media empezamos el recorrido cruzando el túnel que se encuentra siguiendo la carretera a escasos metros del restaurante. 




Como habéis visto una foto, tan solo hay un poco menos de 2 kilómetros hasta la entrada al Caminito del Rey per se, pero nosotros nos lo tomamos con calma haciendo fotos del embalse de Gaitanejo, ya que íbamos con tiempo suficiente como para disfrutar de las vistas y del paseo. 






El recorrido es bastante cómodo y se agradeció el no cruzarse casi prácticamente con nadie así que hasta nos permitimos el lujo de quitarnos la mascarilla a ratos. 





Al llegar a la Central Hidroeléctrica ya nos encontramos con bastante más gente, pasas el control de entradas en grupos de unas 20 personas (aunque luego por el recorrido cada uno va a su ritmo) y te dan un casco y un gorro de plástico para debajo del casco. Ya estábamos preparados para empezar a disfrutar del Caminito del Rey. 





El primer cañón que se recorre es el Desfiladero de Gaitanejo de aproximadamente 3 kilómetros. El recorrido por las pasarelas es impresionante, en algunos tramos puedes ver el antiguo camino. No tengáis ningún miedo ni dudas al respecto, es totalmente seguro. 














A continuación pasas por una zona donde no hay pasarelas, el Valle del Hoyo, que te viene bien para descansar o para hacer un alto en el camino y recuperar fuerzas para seguir adelante. 





El siguiente tramo de pasarelas es el Desfiladero de los Gaitanes hasta llegar al puente colgante que se encuentra prácticamente al final del recorrido.







Hay una zona en la que el suelo de cristal te permite ver toda la caída del desfiladero. Impresionante. 




El último tramo de pasarelas fue muy divertido ya que al fondo podíamos ver el puente colgante a unos metros sobre el río Guadalhorce y la verdad es que la emoción nos embargaba. 





Hasta nos atrevimos a hacernos una foto en el puente. Bravo, qué valientes fuimos.


El recorrido hasta el término de las pasarelas termina enseguida después del puente y ya pasas a recorrer la última zona hasta el torno de salida. Este último tramo se nos hizo más pesado, el cansancio ya se iba notando así como el calor porque no había ninguna sombra en la última parte del recorrido. 








Una vez que pasamos los tornos ya de salida, tuvimos que sentarnos a descansar un rato y a recargar las pilas, sobre todo beber. Un consejo que os damos desde este blog es que llevéis buena cantidad de agua o de líquido porque por el trayecto no hay ni una fuente, deciros que nos recomendaron a la entrada llevar un litro mínimo por persona y evitar las horas de mucho calor, de hecho alguno de los días que estuvimos por la zona, tuvieron que cerrar el acceso a las horas de máximo calor para evitar problemas con el público. 


En total entre descansos, paradas para hacer fotos y tomándonoslo con mucha tranquilidad, tardamos en hacer todo el recorrido unas 3 horas aproximadamente. Y así llegamos ya a la parada de autobús desde la localidad del Chorro hasta donde habíamos dejado el coche. 

Como os podéis imaginar después del día de excursión por el Caminito del Rey y con el calor que pasamos, sobre todo al final del recorrido, pero emocionados por al final haber podido cumplir uno de nuestros sueños viajeros y más en un año tan difícil para todos, nos pasamos toda la tarde de vuelta al hotel en la piscina descansando hasta la hora de la cena. 



Al día siguiente terminaba nuestra estancia en el hotel Roc Costa Park de Torremolinos y empezamos una nueva aventura desde la Casa La Macera en Frigiliana. 

Comentarios