La Maison de Maria en Roma

Para nuestras vacaciones en Roma de Semana Santa del 2019, reservamos por booking el apartamento La Maison de Maria, en Via dei Savorelli, 54, a unos 3 km del Vaticano. Como siempre, a la hora de elegir alojamiento en cada uno de nuestros viajes, tenemos en cuenta la relación calidad-precio, y las opiniones de los viajeros en las redes sociales y en las distintas páginas de hoteles como booking o tripadvisor. 

Ningún problema a la hora de hacer el check-in, tan solo que habíamos quedado con la persona responsable a una hora y llegó un poco más tarde porque tenía varias entradas a esa misma hora. En contrapartida, le habíamos pedido que nos comprara unas cosas ya que llegamos un domingo y no solo nos había traído más cosas y no nos las cobró sino también nos regaló una botella de vino blanco y un panettone. 

La casa estaba situada en una especie de urbanización, por lo que era muy tranquila, sin ruidos de ningún tipo ya que la fachada no daba a la calle, sino a una especie de patio abierto. 

El apartamento estaba situado en la planta quinta, en realidad era una sexta, y el ascensor no tenía una gran capacidad, así que excepto para subir las maletas y bajarlas, el resto de días tuvimos que probar nuestras fuerzas después de más de 24000 pasos por Roma.

Consta de una entrada con un amplio armario, un salón comedor con cocina americana, tres habitaciones, dos de matrimonio y una doble, dos cuartos de baño con ducha y una pequeña terraza. 

     

      

Con respecto a la cocina, tenía un microondas, algo ya antiguo, un tostador, una cafetera, un frigorífico y utensilios suficientes para preparar una cena rápida. También a nuestra llegada, había sal, azúcar, aceite y algunos alimentos más no perecederos. 

Tuvimos un problema con el agua caliente ya que el calentador no nos permitía a los 7 ducharnos por la noche. Un grave error. Pero afortunadamente se lo hicimos saber a la persona responsable, y lo solucionó enseguida, al parecer desconectando la lavadora del calentador. No entendimos muy bien lo que quiso decir, pero el caso es que al tercer día todos nos pudimos duchar con agua caliente. 

Los puntos positivos del alojamiento fueron: el precio, la ubicación (aunque personalmente si vuelvo a Roma me hospedaré por la estación de Termini), la tranquilidad, y la decoración de la casa. 

Los puntos negativos, aparte del mencionado del agua caliente, el hecho de que la cocina no tuviera campana extractora y más teniendo un sofá cama en el salón, el deterioro de los cuartos de baño, que necesitan una reforma, la falta de ascensor, la cual desconocíamos. 

Para llegar al centro de Roma, teníamos dos opciones, el metro desde la estación de Baldo degli Ubaldi de la línea A, situada a unos 10 minutos andando de la casa. Pero solo lo cogimos el primer día porque por obras estaban cerradas tres estaciones del centro de Roma. Al final el medio de transporte que utilizamos todos los días para llegar al centro y volver fue el autobús en concreto el 916 que terminaba su recorrido en la Plaza Venecia. 

En general, buena relación calidad-precio pero no creo que ahora mismo se merezca la puntuación de 9,1 que tiene en booking, entre un 7 y un 7,5 estaría bien. Correcto pero mejorable en algunos aspectos.