Nos levantamos temprano, muy temprano, porque queremos aprovechar el fin de semana al máximo. Desgraciadamente una de las componentes del grupo no se encuentra al 100%, un virus estomacal la acompañó durante todo el viaje, lo que mermó sus opciones de disfrutar del mismo. Vamos a tener que volver pronto de shopping a Londres para que se pueda resarcir de este viaje, jejejeje
Uno de nuestros rituales, foto a la entrada del hotel antes de dirigirnos a la estación de King's Cross con destino a Candem, pero antes de ello un paseo por las tiendas de St. Pancras, sobre todo por nuestra querida Cath Kidston. Curioso el árbol de Navidad de este año de Tiffany's.
Primer destino del día: Candem Town. Vamos de shopping, a ver qué de zapatillas conseguimos comprar. Un ritual en nuestros viajes, aunque en esta ocasión, solo algún miembro de los 7 fantásticos encontró lo que andaba buscando.
En esta ocasión nos centramos únicamente en Candem Town y sus tiendas de zapatillas y souvenirs varios pero no llegamos hasta The Stables. Teníamos un planning intenso porque solo íbamos a pasar dos días en la ciudad. Esos gofres que se han puesto de moda ahora caerán en una próxima visita.
Volvimos a tomar el metro para trasladarnos ahora hacia el sur, hasta la Torre de Londres ya que uno de los integrantes del grupo quería mirar a ver si podía comprar alguna moneda conmemorativa para su colección en la tienda de la Torre ya que al no haber estado en jueves, no pudimos ir al mercadillo de monedas de Charing Cross. De paso pudimos ver la pista de patinaje que habían instalado justo frente al monumento.
Aprovechando que estábamos por la zona y además había reservado la comida en un pub cercano, nos dirigimos a descubrir un lugar que tenía en mente desde hacía tiempo: St Dunstan in the East. Hoy en día solo se pueden visitar los restos de la iglesia que se vio gravemente afectada por el incendio de Londres de 1666 y con los bombardeos de la segunda guerra mundial. Afortunadamente la torre edificada por Wren, el mismo que diseñó St. Paul, sigue en pie. Y leyendo sobre la iglesia y el jardín que hay hoy en su interior, me he enterado que fue el escenario en el que Ross y Emily de Friends se casaron, bueno, en realidad no llegaron a casarse porque Ross se confundió de nombre y dijo el de Rachel.
Algunos integrantes del grupo empezaban ya a sentirse mal y otros se solidarizaron con ella, jejejeje
Aún teníamos tiempo antes de comer para poder acercarnos a Leadenhall Market, ya habíamos estado en nuestro segundo viaje conociéndolo pero no en Navidad, así que tocaba descubrirlo con toda la decoración navideña y la verdad es que nos encantó, lástima que al ser sábado casi todas las tiendas estaban cerradas.
Volvimos a tomar el metro para trasladarnos ahora hacia el sur, hasta la Torre de Londres ya que uno de los integrantes del grupo quería mirar a ver si podía comprar alguna moneda conmemorativa para su colección en la tienda de la Torre ya que al no haber estado en jueves, no pudimos ir al mercadillo de monedas de Charing Cross. De paso pudimos ver la pista de patinaje que habían instalado justo frente al monumento.
Aprovechando que estábamos por la zona y además había reservado la comida en un pub cercano, nos dirigimos a descubrir un lugar que tenía en mente desde hacía tiempo: St Dunstan in the East. Hoy en día solo se pueden visitar los restos de la iglesia que se vio gravemente afectada por el incendio de Londres de 1666 y con los bombardeos de la segunda guerra mundial. Afortunadamente la torre edificada por Wren, el mismo que diseñó St. Paul, sigue en pie. Y leyendo sobre la iglesia y el jardín que hay hoy en su interior, me he enterado que fue el escenario en el que Ross y Emily de Friends se casaron, bueno, en realidad no llegaron a casarse porque Ross se confundió de nombre y dijo el de Rachel.
Algunos integrantes del grupo empezaban ya a sentirse mal y otros se solidarizaron con ella, jejejeje
Menos mal que conseguimos que se levantaran para la foto.
Aún teníamos tiempo antes de comer para poder acercarnos a Leadenhall Market, ya habíamos estado en nuestro segundo viaje conociéndolo pero no en Navidad, así que tocaba descubrirlo con toda la decoración navideña y la verdad es que nos encantó, lástima que al ser sábado casi todas las tiendas estaban cerradas.
Hora de reponer energías. Y un feliz descubrimiento: el fish and chips del pub The Ship, riquísimo, de los mejores que hemos comido de todos nuestros viajes a la capital británica.
Toda la tarde por delante para seguir nuestro recorrido por Londres. Siguiente parada: Forbidden Planet, nuestra tienda friki favorita y Seven Dials con la tienda de Cath Kidston y sus calles llenas de encanto. Poco a poco va anocheciendo y podemos disfrutar de las luces navideñas por la zona.
Y por supuesto en nuestro tour navideño, no podía faltar Covent Garden que este año estaba aún más con más decoraciones y con su precioso árbol de Navidad. Me encanta la animación de esta zona.
De camino a nuestro siguiente destino: Leicester Square y Picadilly Circus para que desde allí subir por Regent Street a Oxford Street y poder ver las luces de Carnaby Street y del Soho, hicimos una breve parada en un Costa, necesitábamos descansar y reponer fuerzas con un chocolate caliente y no porque estuviera haciendo frío, porque la verdad es que la ropa térmica acabó quedándose en el hotel del poco frío que nos estaba haciendo.
También paseamos por Chinatown, pero desde luego las luces de Carnaby dedicadas a Queen y Bohemian Rapsody fueron sin duda las que más nos impresionaron.
De camino a Oxford Street, de nuevo volvimos a enamorarnos de esos ángeles alados de Regent Street pero nuestro intento de entrar en Hamleys quedó solo en eso, hasta arriba de gente, a ver, era sábado, así que todo el mundo había salido a ver las luces de Navidad y a comprar al centro. También dimos un paseo por New Bond Street con esas luces en forma de pavos reales y por South Molton Street. Desde luego Londres es precioso en Navidad.
Ya en Oxford Street, nos dedicamos a unas cuantas compras más en nuestras tiendas favoritas, HMV, Disney Store, JD Sports y por supuesto Primark.
Después del Primark teníamos la intención de acercarnos a Winter Wonderland, de hecho había quedado con dos Sherlockian conocidas mías, pero por desgracia nuestra enfermita estaba agotada, prácticamente todo el día sin comer, con el estómago mal y con todo lo que habíamos andando, que decidimos volver al hotel. Compramos algo de cena en el Burger y nos lo tomamos en la habitación. Vamos a tener que volver a Londres en Navidad para resarcirnos de este viaje jejejeje. Será por excusas.
Toda la tarde por delante para seguir nuestro recorrido por Londres. Siguiente parada: Forbidden Planet, nuestra tienda friki favorita y Seven Dials con la tienda de Cath Kidston y sus calles llenas de encanto. Poco a poco va anocheciendo y podemos disfrutar de las luces navideñas por la zona.
De camino a nuestro siguiente destino: Leicester Square y Picadilly Circus para que desde allí subir por Regent Street a Oxford Street y poder ver las luces de Carnaby Street y del Soho, hicimos una breve parada en un Costa, necesitábamos descansar y reponer fuerzas con un chocolate caliente y no porque estuviera haciendo frío, porque la verdad es que la ropa térmica acabó quedándose en el hotel del poco frío que nos estaba haciendo.
También paseamos por Chinatown, pero desde luego las luces de Carnaby dedicadas a Queen y Bohemian Rapsody fueron sin duda las que más nos impresionaron.
Ya en Oxford Street, nos dedicamos a unas cuantas compras más en nuestras tiendas favoritas, HMV, Disney Store, JD Sports y por supuesto Primark.
Después del Primark teníamos la intención de acercarnos a Winter Wonderland, de hecho había quedado con dos Sherlockian conocidas mías, pero por desgracia nuestra enfermita estaba agotada, prácticamente todo el día sin comer, con el estómago mal y con todo lo que habíamos andando, que decidimos volver al hotel. Compramos algo de cena en el Burger y nos lo tomamos en la habitación. Vamos a tener que volver a Londres en Navidad para resarcirnos de este viaje jejejeje. Será por excusas.
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