Blog Los viajes de Dora Un paseo por Las Hurdes en Extremadura ~ LOS VIAJES DE DORA
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Un paseo por Las Hurdes en Extremadura

Os voy a ir contando en este post nuestro breve pero intenso paseo por la comarca de Las Hurdes (Extremadura).

Y en primer lugar queremos dar las gracias a ExtremaduraVirtual por ese premio que nos permitió disfrutar de una noche gratis en el hotel rural Cristania en Caminomorisco y gracias a su administradora Cristina Bauzas.

Empezamos nuestro recorrido por Las Hurdes en la localidad de Casar de Palomero.

Dimos un paseo por sus calles centrándonos en la visita de la Basílica de la Cruz Bendita (S.XVIII), antigua sinagoga y de la Parroquia del Espíritu Santo, antigua mezquita (S.XVIII) como grandes construcciones.

También dimos  un paseo por las estrechas calles del barrio judío y por el barrio árabe, contemplando las distintas construcciones y llegar a la plaza mayor y observar los magníficos y antiguos soportales.


     





     




Después nos dirigimos a la localidad de Pinofranqueado, fundamentalmente porque ahí se encuentra el Centro de Interpretación de Las Hurdes para pedir información.

De esta localidad destacamos su piscina natural que nos pareció un paraje muy agradable y la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Encina, obra de mampostería encalada entre los siglos XVII y XVIII.










Nuestro siguiente punto de destino antes de comer fue uno de los grabados rupestres que se pueden visitar en Las Hurdes. Elegimos como ejemplo uno de los que se encuentra más cerca de la carretera ya que ya teníamos planificado un paseo para la tarde y para el día siguiente.

En concreto nos acercamos al Huerto del Cura en las inmediaciones de Aceitunilla (Nuñomoral).

Los motivos representados en este conjunto son muy habituales en la zona: escaleriformes, estrellas de cinco puntas, y círculos radiados y y concéntricos.

Los grabados se encuentran al borde del camino a unos 1,5 km de Nuñomoral en dirección a Aceitunilla.

Por el camino seguimos disfrutando de la belleza rural de esta comarca.



     

     




De nuevo a Nuñomoral dimos un corto paseo pero al no encontrar ningún restaurante en donde comer, tuvimos que volver a Vegas de Coria.

El Ayuntamiento y la ermita podemos considerar los dos edificios más emblemáticos de Nuñomoral, al haber conseguido su utilidad sin renunciar a la arquitectura típica de Las Hurdes.







En Vegas de Coria comimos en el Restaurante Los Angeles un típico menú hurdano por 25€. Os dejo los distintos menús del restaurante. Fueron bastante amables sobre todo con nuestros chicos pues evidentemente a ellos no les gustaba el menú, así que les prepararon una especie de plato combinado a su gusto.









Y ya repuestos nos dirigimos a la alquería de El Gasco para ver la famosa Chorrera de la Meancera. Por el camino era inevitable pararse para fotografiar los impresionantes meandros del río Malvellido.


     






     





Chorro de la Meancera (El Gasco - Las Hurdes)

Este era uno de los planes previstos para este primer día en Las Hurdes y la verdad es que no nos decepcionó.

Tuvimos muchísima suerte pues fue terminar el recorrido de vuelta a la alquería de El Gasco y empezó a llover y aunque por Internet encontréis información sobre la ruta que os diga que es fácil, en mi parecer, es de dificultad media.

La primera parte del recorrido discurre por un camino llano bien señalizado de pizarra y de gran facilidad justo al lado del río.

Pero poco a poco la ruta va aumentando su dificultad incluso teniendo que pasar repetidas veces por el río entre las piedras. Y ya en un momento dado, sólo pudieron continuar con la ruta mi marido y mi hijo mayor porque la dificultad empezaba a ser considerable para el pequeño de la familia y para mi,  Wink Wink

El chorro de la Meancera es un salto de agua impresionante de unos 150 metros. Una verdadera belleza.


     









     









     









Sin duda mereció la pena.

Después de un reparador sueño y un desayuno estupendo en el Hotel Rural Cristania en donde estábamos hospedados, decidimos ya partir hacia casa, haciendo una parada más duradera de lo que habíamos pensado de antemano, para ver el Meandro Melero.

Esta ruta nos lleva por una pista de tres kilómetros hasta un mirador con una vista espectacular sobre el Meandro del Melero, formado por el río Alagón en las cercanías de Riomalo de Abajo, en el límite oriental de la comarca de las Hurdes.

El camino transcurre primero por pista cementada, y más tarde por pista de tierra. No tiene especial dificultad, en algunos tramos puede llegar a ser algo cansado sobre todo si no estás acostumbrado a andar. Está permitido el acceso a vehículos, lo que hace perder encanto a la ruta. No obstante, la vista que ofrece el mirador hace que la ruta merezca la pena.

Y la verdad es que mereció la pena. Las vistas desde el mirador del meandro son magníficas y la experiencia de disfrutar de la naturaleza con nuestros enanos también.
















Y con esta ruta terminó nuestra corta pero intensa visita a la comarca de Las Hurdes. Una vez más queremos agradecer a ExtremaduraVirtual su premio para poder disfrutar de algunos de los lugares más autóctonos y singulares de Extremadura.

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